lunes, 17 de noviembre de 2014

Entrégame tu visión

 
 Sobre su mesa se amontonan datos recopilados durante años. Su intención recrear un capítulo de nuestra Historia. Su personaje principal será Doña Concha Lizárraga.  Ello le ha convertido en una rata de biblioteca con mascarilla. Es alérgico a los ácaros del polvo que se ocultan entre las páginas de los libros.
 Físicamente es un hombre que no resalta, que no resaltaría a simple vista de no ser por sus gestos gentiles, amables como norma de vida. Es raro, excepción en él la perdida de compostura y no le dura en exceso. Es un hombre de esos que mantienen el temple en toda circunstancia logrando tomar las riendas de las mismas. Conocerlo es descubrir la elegancia interior, una elegancia que no se puede equivocar con la pijotería superficial imperante.
 Me dice su compañera que no soporta a los fínolis,  lo que cuadra con la idea que he ido forjando sobre él. Y sobre ella, su cómplice vital. En la obra ella es  la visión femenina.
 Barajan tres posibles títulos para su obra, para su primer hijo común: " La visión oculta ", " La visión perdida ", " La visión entregada a nadie " constan en la primera página de sus anotaciones. Se refieren con ello a un tipo de mujer, la creyente cuya visión testimonial se ha perdido en la historia por causa de dicha fé. Aunque no es la Historia, no somos nosotros los únicos perdedores.
 Repentínamente él la mira como nunca la había mirado y en tono suplicante,  angustiado.
- ! Ámame sobre todas las cosas y nunca, nunca me temas !
- Siempre te digo lo que pienso, Dios ateo.  Incluso de ti ! No temas te oculte mis juicios jamás !  Tengamos fé cada uno en sí, el uno en el otro y todo irá bien. De hecho acepta como crítica a esas tus palabras una omisión ! Sobre todas las cosas que no sobre todos los demás !  No solo siento amor de pareja y lo sabes. Sois muchos, muchos y habrá más que formen parte de mi vida afectiva. Y también anota amarme tú a mi sobre todas las cosas. Yo también me amo. No dejes tus frases inacabadas
-  Tienes razón, querida. Yo tampoco te amo solo a ti. Aunque agregaré que de esta manera sí.
-  Es recíproco.
- ¿ Qué significado tendría en su relación la fé de ella en ese dios que la inculcaron ?
- Tú lo has dicho. Se entregaba a él. A ese dios al que la condenaron a creer era a quien le contaba el como veía esto, aquello y lo otro. A Don Miguel solo un poco. No lo suficiente.
-   Condenándola a ella le condenaron a él. Tres,  " Tres son multitud " en una relación de pareja. Dos memorias que debieran ser una ¿ Tres cuartos ?
- Difícil saberlo. Y hablamos de un caso en que se ve la influencia de ella, luego que ella tenía juicio, aunque parcial y erróneo debido a dicha creencia. Y cuatro si cuentas al confesor.
- Doña Concha desde luego que tenía que ser una mujer con formación o para nada hubiesen hecho pareja. Está claro que él consideraba cuanto ella le decía. Sin embargo.....Ahora critico yo. Es imposible que él llevase bien la.. ¿ Existencia del amigo inexistente ?
- Llámalo El intruso inexistente. Nos entendemos y bien.
- O Un dios artificial.
- Me gusta. Un dios artificial me gusta ! Cuanta energía hacen desperdiciar con él a uno y otro sexo ! Y dolores, quebraderos de cabeza desorientando con él en todas las disciplinas a todo Dios.
- Tienes razón. Más de uno se ha dejado los sesos queriendo incluso acabar con él.
- Bueno,  pues yo me voy a conocerlo un poco más en una obra de divulgación científica que trata de él precisamente. O debo decir de como conexionan eléctricamente los datos, la información cultural pasada y presente.
- Espero dicha obra te de la confirmación, confirme lo acertado de tu visión. Ya me la entregarás cuando concluyas de escuchar al autor.




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